El concepto de comida callejera es amplio y muy difícil de delimitar, cuando hablamos de este tipo de comidas nos referimos a la que se toma en puestos, tenderetes, casetas, carritos… situados en la calle, en mercadillos, en ferias, fiestas populares… son platos rápidos y que se comen “a mano” con los dedos y sin cubiertos.
En Cocinas del Mundo este mes nos vamos a Queens (Nueva York) a explorar la «street food» tan celebrada en las calles de la Ciudad de los rascacielos, pero hemos ampliado el concepto y como la «City» es un crisol de culturas y de ciudadanos de todas las partes del mundo.
Las posibilidades son tantas como quieras, para conocerlas he preparado este texto, dividido en dos entradas en las que vamos a hacer una revisión a este tipo de comida, que será para hacer honor a una de sus características principales rápida y que nos servirá para abrir boca y descubrir los más insólitos bocados que se sirven por todo el mundo.
La comida callejera, un concepto nuevo en España
En España este concepto es totalmente nuevo y una corriente que está muy de moda aquí hasta hace muy poco tiempo era una falta de respeto y de educación comer por la calle, había un dicho popular que sentenciaba que si una mujer lo hacia se quedaba para vestir santos (soltera).
La comida callejera española se ceñía a mercados y mercadillos, a las fiestas de los pueblos y poco más. Esta falta de tradición se debe a que en España siempre hemos contado con los “bares” muy prolíficos y comunes, para todo tipo de consumidores, para todos los bolsillos y muy visitados por todos los parroquianos, centro social donde se reúnen vecinos y amigos y con nuestras tapas que son tradición, cultura y unos bocados exquisitos.
Los food truck
Comer en los puestos callejeros en España es una diversión no como en otros sitios, se crean eventos de “food truck” con vehículos preciosos y de lo mas pintón y se degusta un tipo de gastronomía internacional que es divertida y gustosa.
Rompe con las tradicionales bocadillos de chorizo de las ferias populares o de los puestos de churros tan celebrados pero que muchas veces dejan mucho que desear por los terribles aceites mal olientes que utilizan.
La comida callejera en el mundo:
En otros lugares la comida callejera es una forma de ganarse la vida y de comer barato, en medio mundo, mejor en las tres cuartas partes del mundo, desde Pekín a Ciudad de Méjico, pasando por Japón, Vietnam o Frankfurt se come en la calle.
A su alrededor crece un comercio que permite subsistir a los vendedores y a los productores y ofrece la posibilidad de alimentarse a un precio mínimo a mucha gente que si no fuera por este tipo de comidas no podría subsistir.
Según un informe de la FAO (Organización para los Alimentos y la Agricultura de las Naciones Unidas) en Calcuta la venta de alimentos supone un montante de más de 100 millones de dólares y en América Latina un ingreso entre 150/500 dólares por vendedor al mes.
La comida callejera una forma de comer en el mundo entero
Esta forma de comer esta tan extendida que muchos comedores escolares de Tailandia y filipinas encargan los menús a puestos de comida de la calle.
Este es un trabajo de hombres y de mujeres, en África el 80% de los puestos los ocupan mujeres lo que es vital en la economía ya que las mujeres invierten el dinero obtenido en su familia y no en otros menesteres más lúdicos.
La comida callejera y la higiene:
En la actualidad hay mas control ya que un problema que tiene esta forma de comer es la higiene, la FAO se encarga de poner agua potable y chequeos médicos a los vendedores y en Malasia como ya en otros países es necesario sacarse una licencia.
En España como es obvio e imperativo categórico tener la licencia de venta ambulante y cumplir los requisitos sanitarios exigidos aunque quien no se ha comido un bocadillo “callejero” poco fiable en una noche de farra.
Tipos de comida callejera
La comida callejera es muy variada y se adapta a los productos y costumbres de la zona vamos a dar un repaso rápido por las más celebradas.
Por todo el Mediterráneo que gracias a su agradable clima invita a disfrutar de la calle encontramos infinidad de bocados suculentos.
Comenzaremos por Italia con sus celebres “pizzas” entre las que destacaremos la “portafoglio” de Nápoles que no es más que una pizza doblada que se puede comer tranquilamente paseando; las focaccias que cuando son súper finas se convierten en “piadina” típicas de la Romaña o la “farinata” una focaccia fina de garbanzos tradicional de Génova.
También encontraremos los aranccini sicilianos o la versión romana “los suplí al teléfono”, y entre otros “ascolana”, las aceitunas verdes rellenas.
En Paris disfrutaremos de las baguettes frías o calientes y con mil rellenos diferentes, en Gran Bretaña del “fish and chips” en Bélgica de los cucuruchos de “frites” patatas fritas con mahonesa o los gofres símbolo de este país.
Por todo el norte de Europa en los muelles hay puestos de mariscos como en España que en Galicia contamos con el famoso mercado de la Piedra donde se degustan unas ostras exquisitas.
Y mañana nos vamos a Oriente. Os espero.
el libro , los beneficios se donarán a 
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