Museo Vivanco de la Cultura del Vino, una experiencia que no te puedes perder.

En el Museo Vivanco de la Cultura del Vino encontraras reunidos todos los elementos que forman parte del mundo del vino desde la prehistoria hasta nuestros días, en 4.000 metros cuadrados está reunido todo lo que hay que saber para ser un experto en el tema. Comenzando, en el Jardín de Baco, con una colección de vides con más de 220 variedades de todo el mundo  y siguiendo con cinco salas de exposiciones permanentes y una  temporal, una sala de cata, un super restaurante y muchas cosas mas por lo que si eres un amante del vino no te lo puedes perder.

Cuando te planteas un buen fin de semana lo más importante es elegir tu lugar de destino que tiene que recoger varias características que conviertan tu ocio en toda una experiencia inolvidable, no solo queremos alimentar nuestro cuerpo y disfrutar de la gastronomía local también queremos conocer cosas nuevas, ver obras de arte, aprender y enriquecernos espiritualmente, por eso elegir La Rioja es éxito asegurado vayas donde vayas, pero si tu elección recae en Briones la experiencia será inigualable, pasearas por un pueblo precioso de calles empedradas y sinuosas que te llevara de viaje al pasado y después podrás aprender todo sobre el vino, en un día más que en toda tu vida, primero la bodega y luego el Museo o viceversa, será una lección magistral que abarca todos los campos de conocimiento desde la Historia hasta la elaboración, el mantenimiento, la distribución o el descorché de una botella. En el Museo Vivanco de la Cultura del Vino las horas pasan volando.

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Ya os he contado que Briones es un pueblo precioso de tierra roja y colores especiales, únicos: el rojo de sus campos; el verde las hojas de las parras; el morado de la uva, intensos, que se grabaran en tu memoria y ya, para siempre, cuando los veas en cualquier lugar, recordarás esta bella tierra. Este situado encima de una colina y a sus pies se encuentra un enorme complejo dispuesto para que te quedes con la boca abierta y salgas saturado de emociones y pletórico por haber pasado un gran día. Estamos hablando del Museo Vivanco de la Cultura del Vino, inaugurado en 2004 y declarado mejor museo de vinos del mundo por la OMT-ONU, quiero que me acompañéis a visitar sus salas, a empaparnos de la cultura que alberga y a descubrir el misterio y el milagro que se esconde en una botella de buen vino.

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Comenzaremos por la Sala 1, llamada: “Nacer, crecer, madurar”, donde entraremos de cabeza en este mundo mágico, descubriremos el origen del vino; los diferentes “Terroir” (la tierra) que hacen que cada vino sea distinto; como se cultivan las vides (podas, oreado del terreno, vendimia….); enfermedades y plagas como la filoxera que arruino en el siglo pasado miles de viñedos y curiosos utensilios y aperos de labranza que han servido de ayuda en esta dura tarea.

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En cuanto a la elaboración del vino descubrirás la evolución que, desde tiempo inmemorial hasta nuestros días, ha seguido este trabajo milenario. Partiendo de unos paneles que nos enseñan cómo se prensaba la uva en Egipto y Roma, hasta las más modernas técnicas del SXXI.

Descubrirás enormes presas de madera, presas movibles, despalilladoras de lo mas rustico, fumigadoras, … artilugios inventados por el hombre para facilitar su tarea, acompañados con videos que te dejaran claros todos los conceptos.

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La sala 2: “guardar las esencias” nos muestra la evolución de los contenedores del vino: la fabricación de una barrica, de  los corchos y el soplado del vidrio, en unos interesantes videos veras como se trabajan estas artes tan necesarias para el buen mantenimiento de nuestro protagonista.

La sala 3 nos adentra en la “bodega”, inmensa y moderna que cuenta con una de las más bellas salas de barricas del mundo, contemplarla es extasiarte y tu espíritu se llena de paz y de sosiego, notando el pulso del vino, la serenidad del reposo, la paz del silencio.

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En esta sala sentiremos el vino organolépticamente, veremos sus diferentes tonalidades y podremos experimentar sus aromas, sentirlos y descubrirlos.

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La sala 4 denominada: “el vino, arte y símbolo”, recoge la colección de arte y arqueología que tienen como denominador común y protagonista a nuestra estrella: el vino, desde la prehistoria a la actualidad con obras de Jan van Scorel, Pablo Picasso, Sorolla, Joan Miró, Juan Gris o láminas originales de Walt Disney.

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En la 5ª sala llegaremos al momento cumbre de nuestro periplo vinícola: “abrir, servir y beber”, para el primer menester nos encontraremos con la mas fabulosa colección de sacacorchos del mundo, doy fe: es súper curiosa y original, con unas 3500 piezas que abarcan diseños del SXVIII hasta los más modernos y sofisticados que te puedas imaginar.

Y seguimos con los contenedores: copas, porrones, decantadores, vasos…., nos muestran la evolución de elementos de servicio del vino desde la antigüedad hasta el SXX.

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Y terminaremos degustando una copa de buen vino, remate final a una experiencia que nos ha dejado satisfechos y con un bagaje de conocimientos que no nos podíamos imaginar cuando cruzamos el umbral de la puerta del Museo.

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Este fantástica obra se la debemos a Pedro Vivanco y a su familia, cuatro generaciones dedicadas  al mundo del vino. Partiendo de una pequeña bodega en Alberite hasta la de Briones ha pasado mucho tiempo de esfuerzo y de trabajo que culmina en esta magna obra que no te puedes perder.

Para facilitar tu visita cuentan un pack especial  para disfrutar de la «experiencia Vivanco», haciendo tu reserva por 15 euros podrás visitar el Museo y la Bodega y degustar dos copas de vino. Pero hay más opciones: realizar una visita guiada,  acompañar tu visita con una fabulosa comida en su restaurante, a la carta o con un menú; participar en una cata o realizar un curso de iniciación a la cata. Como ves las posibilidades son múltiples, así que visita su web y elige tu opción favorita y haz tu reserva, el plan no puede ser más atractivo.

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No te puedes perder la Rioja, una tierra bella y acogedora donde se come y se bebe genial y que cuenta con una gente maravillosa y por supuesto no te puedes perder el Museo Vivanco de la Cultura del Vino. Ve y cuéntame tu experiencia, la mía fue genial y después de muchos años, todavía sonrió cuando recuerdo el día que lo visité.

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