Estas lentejas proceden de Avernia en el centro de Francia, es una región volcánica lo que la convierte en poseedora de un Terroir muy especial. En estas hermosas tierras se cultivan las lentejas desde la época de los galos y desde entonces hasta ahora esta pequeña legumbre tan apreciada por todo el mundo ha cambiado muy poco.
Fue bautiza en 1930 por la botánica rusa Helena Barulina como «Lens culinaris puyensisel» nombre que se transformo con el paso del tiempo en «Lens esculenta puyensis» y se la conoce popularmente como “Lentille verte du Puy” y en nuestro idioma como «lentejas verdes de Puy». Tienen “L’ Apellation d’Origine Protégée” (AOP), equivalente a nuestras denominaciones de origen protegidas que velan por la preservación de productos tan singulares. L’ Apellation lentille verte du Puy” están reconocida por los tribunales desde 1935 para protegerse de los abusos de rusos y alemanes que llevaban sus lentejas a la zona, las envasaban con la marca y las vendían mucho más caras.
La zona de producción se limita a 87 comunidades de la Haute-Loire principalmente en Velay y Basin du Puy. Son especialmente pequeñas con un diámetro entre 4/5 mm. Y un espesor de 2/2,5 mm. Su color se lo deben al pigmento “azul antocianina” que mezclado con el colorante amarillo de su núcleo le proporcionan un tono verdoso. Son especialmente aromáticas ya que contienen mas sales minerales que sus primas más grandes. Esto se lo deben al “Terroir” de origen volcánico y al clima tan especial que disfrutan. Muy frío en invierno y ventoso y seco en verano.
Se planta siguiendo los ciclos lunares, en el último cuarto de la luna menguante, cuando la temperatura del suelo es de 5º, en campos muy limpios y arados. Está prohibido sembrar dos años consecutivos en la misma parcela para evitar el agostamiento del suelo y la pérdida de minerales de la tierra, está terminantemente prohibido usar fertilizantes y el riego está controlado. Se cosechas desde mediados de Julio a mediados de Septiembre.
Para cocinarlas no se necesita remojarlas con anterioridad ya que tienen una piel muy delgada y permeable lo que permite su mayor absorción de los líquidos además tiene muy poco almidón por lo que su tiempo de cocción será mucho mas corto. Contienen mas sales minerales que sus primas mas grandes, especialmente magnesio y hierro concentrados tanto en la cascara como en el núcleo
Estas ricas lentejas tienen muchas propiedades, son antioxidantes debido a la presencia de antocianinas (pigmentos hidrosolubles que se hallan en las células vegetales y que pertenecen al grupo de flavonoides) lo que le da un gran efecto antioxidante protegiendo contra muchas enfermedades como el declive intelectual, las enfermedades cardiovasculares o el cáncer. También gozan de abundante proteínas ya que poseen gran cantidad de aminoácidos lo que hace que 100 gr. de lentejas cocidas (50 gr. en seco) equivalen a 60 gr. de carne.
Son muy ricas en fibra, aunque en este punto pierden frente a las lentejas de mayor tamaño pero el tener la piel más fina facilita la digestión y evita las flatulencias
En resumen tienen una textura muy fina y sabor suave combinan a las mil maravillas con las hierbas aromáticas mediterráneas y las especias picantes, no resultan harinosas y mantienen la consistencia cuando se cocinan. Son perfectas para elaborar ricas ensaladas.
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3 Comentaros
No conocía estas lentejas.
Las buscaré, que ahora en verano comemos las legumbres en ensalada o salteados.