El bacalao con «mahonesa» de ají amarillo es un plato sencillo y delicioso, no cuesta mucho trabajo elaborarlo y dejará a tus comensales encantados.
Como ya expliqué en la receta de la «mahonesa» de ají, esta es un salsa que sorprende, es suave y deliciosa y con un posgusto picante pero sin abrasar, lo justo para que sea una comida alegre, divertida y llena de color. Un plato precioso.
El bacalao lo podemos comprar salado (tendremos que desalarlo nosotros) o desalado, yo opté por esta solución, es más cómodo y el que yo compro esta buenísimo.
Es muy importante tener cuidado cuando se trabaja con ajíes – una buena idea es utilizar guantes – las manos te quedan llenas de picante, te olvidas, te tocas los ojos y te acuerdas de cuarenta generaciones anteriores del chile rocoto o del que te haya ocasionado tal desastre.
INGREDIENTES para cuatro comensales:
12 lomitos de Bacalao desalado, aceite de oliva (el necesario), «mahonesa» de ají amarillo, 1 manojo de cebollino.
Para la «mahonesa» de Ají amarillo: 200 gr de pimientas de ají amarillo fresco, 3/4 taza de aceite de oliva, Sal, ½ vaso de chupito de vinagre (en este caso he puesto vinagre de sidra)
ELABORACIÓN:
Si hemos comprado el balado salado, tendremos que ponerlo en remojo de unas 36 horas, cambiándole el agua de cuatro a cinco veces. Otra alternativa es comprarlo desalado, hay unas marcas excelentes en el mercado y es más sencillo. Compramos lomitos de bacalao, cortado en tacos de dos centímetros de ancho, nos quedaran unos trozos perfectos para cocinar. Si no la encontráis en tacos, comprar tajadas de lomo y partirlo en tacos de dos cm. de ancho.
Ponemos ½ dedo de aceite en una sartén, calentamos el aceite, no muy caliente, no debe humear, introducimos el bacalao y lo dejamos confitar a fuego lento, cuando un lado comience a blanquear, le damos la vuelta, así por todos los lados. Sabremos que está listo por que se harán lascas. Es importante no pasarlo de fritura. ¡Una delicia!
Picamos muy pequeñito el cebollino.
«Mahonesa» de Ají amarillo: Cortad por la mitad, sacad las semillas y las venas de los ajíes dejándolos perfectamente limpios. Para que tengan un buen sabor y no muramos al comerlos los vamos a blanquear, dos o tres veces, depende de lo que queramos que pique. Ponemos a hervir agua en un cazo, cuando este a borbotones, añadimos los ajíes, esperamos que vuelva a hervir el agua y los retiramos, colamos desechando el agua. Repetimos la operación. Ponemos en el vaso de la batidora o en la thermomix, añadimos el aceite, la sal y el vinagre, batimos hasta conseguir una crema. La pasamos por un colador para que nos quede suave y delicada.
PRESENTACIÓN:
Calentamos el ají, sin que humee, solo ponerlo al fuego para que coja un poco de calor. Al calentar se puede desligar un poco y conviene volverlo a ligar con una varilla o un tenedor para que no nos quede parte del aceite suelto.
Colocamos el bacalao en un plato, lo regamos con «mahonesa» tibia de Ají y espolvoreamos con el cebollino picado. Listo para comer.
5 Comentaros
Tu post es genial, ya tienes una nueva seguidora, enhorabuena.
Que maravilla de plato como bien dices queda sorprendente con ese colorido, pero donde consigo el ají amarillo, me encantaría hacerlo bs guapa
hola María Antonia, este bacalao es estupendo, el ají amarillo lo compro en las tiendas de productos latinos, lo venden en bolsas congelados.
Espero que los encuentres.
Un beso
Concha