En este postre el toque mágico lo aporta el azafrán, no solo le aporta sabor también le añade color, un bonito color amarillo. Es un postre dulce para lamineros (golosones en mi pueblo) enamorados del chocolate blanco. Como es un postre muy dulce, si queremos aportarle un poco de acidez le añadimos un coulis de frambuesas o de futas del bosque que casan a la perfección con nuestro goloso pastel.
INGREDIENTES para 4 comensales:
¼ l. de leche entera, 100 gr. chocolate blanco, brizna de azafrán, sobaos pasiegos, nata liquida.
ELABORACIÓN:
Ponemos la leche a hervir, cuando hierva añadimos unas cuantas hebras de azafrán y dejamos infusionar hasta que tome un bonito color amarillo. Le añadimos el chocolate blanco cortado en trozos, removemos y lo integramos en la leche. Probamos para ver el punto de dulzor, si somos golosos le añadimos mas azúcar. Le añadimos la nata liquida, batimos y dejamos reposar.
Colocamos los bizcochos en una fuente haciendo una cama, bañamos con la crema obtenida y dejamos unas horas en la nevera.
PRESENTACIÓN:
Cuando el postre este bien frio y la crema se haya fusionado con el bizcocho, cortamos un aro porciones individuales. Podemos cubrirla con un culis de frutos del bosque o con hojas de menta. Eso a gusto de cada uno.
2 Comentaros
Soy una de las enamoradas del chocolate blanco.
Qué postre tan original con el azafrán. Nunca se me hubiera ocurrido.
Tienes razón esta riquisimo¡Un beso
Concha