Comer chuletas de conejo es un lujo al alcance de todos los bolsillos, no tienes más que ir a tu tienda habitual donde compras el pollo y el conejo y decirle al Maestro cortador que te deje separadas las costillas (como en la foto del collage), en casa las cortaras en un “pis-pas” sin ningun problema, es muy sencillo solo hay que seguir las líneas que te marca la propia carne. El resto del conejo lo cocinas a tu gusto.
Este plato te lo tienes que plantear como un aperitivo delicioso ya que las chuletitas son un bien escaso pero yo las he comido con mi familia que tienen una buen apetito y la cantidad nos pie para tomarnos un aperitivo de primera.
Yo las he acompañado con un rico mojo picante de jalapeños pero las puedes servir con tu salsa preferida, van geniales con romesco, cualquier salsa de soja, mojo picón, salsa tártara, chinas o japonesas como en la foto que encontraras mas abajo y no sigo enumerando yaque le pegan 1000 o más.. La salsa que elijas para acompañar le dará una personalidad muy diferente al plato, en armonía con ella, selecciona tus acompañamientos. Como el mojo picante de jalapeños tiene mucha personalidad he seleccionado unas alcachofas asadas que combinan muy bien con una salsa tan bravía.
Si no encuentras la lata de jalapeños en España tenemos unas guindillas en vinagre muy ricas, utilizálas también te saldrá genial
INGREDIENTES para cuatro comensales:
Chuletas de conejo, aceite, sal
Mojo picante: 1 lata de jalapeños escabechados, 1 c/c de: menta, perejil, cilantro, 1 limón, el zumo y la ralladura, 100 cc. (Un vaso de chupito) de aceite de oliva virgen suave, sal.
Alcachofas: 8 alcachofas, jamón, aceite, sal.
1 c/c: cuchara de café.
oooOOOOooo
ELABORACIÓN:
Cortar las chuletas:
Para cortar las chuletas necesitamos un cuchillo chuletero con muy buen filo. Cortar separando los palitos, cuando ya tengamos delimitadas las chuletas metemos un cuchillo grande, presionamos y cortamos y ya las tenemos preparadas y listas para ir a la sartén, salamos y pimentamos. Reservamos hasta el momento de comer.
Mojo:
Picamos las hierbas súper mini, pelamos los jalapeños y los cortamos muy pequeños. Metemos todos los ingredientes en un bote con cierre hermético, añadimos la ralladura de limón, el zumo, la sal y el aceite, batimos como si fuera un coctel, probamos y rectificamos si es necesario.
Guardamos en la nevera, que repose un rato para que se asienten los sabores.
Chuletas:
Calentamos una plancha¨o sartén un poco de aceite, cuando humee añadimos las chuletas, las cocinamos hasta que estén doradas y crujientes por fuera, dado el tamaño de las chuletas es muy pequeño, este paso es visto y no visto, súper rápido, hay que estar muy atentos para que no se quemen.
Alcachofas asadas:
Golpeamos las alcachofas contra la encimera de la cocina por la parte de arriba para que se abran, les añadimos un chorrito de aceite, sal y un trocito de jamón. Las apretamos con la mano para cerrarlas y al horno.
Cuando estén bien asadas y con las hojas de fuera muy cocinadas y casi quemadas ya estarán listas, las limpiamos y servimos solamente los corazones bien limpios.
PRESENTACIÓN:
Podemos acompañarlas de otras salsas, en la foto están con salsa de soja preparada, salsa ponzu y aceite de guindilla muy picante, pero estas ricas salsitas las dejamos para otra ocasión.
En un mini bol colocamos el mojo de jalapeño, no lo vamos a extender por el plato ya que es una salsa muy personal y que se consume según los gustos de cada uno, colocamos de forma graciosa las chuletas y las acompañamos de dos o más corazones de alcachofas.
Para decorar he colocado por encima unas rodajitas de guindilla roja fresca y picante que podremos retirar fácilmente, solo quería darle un poco de color a la foto.
Un comentario
Que receta tan estupenda y original, me gusta mucho, segurp que cuando la prepare mis invitados estarán felices.
un beso.
Mari Cruz