Vamos de viaje a un lugar poco habitual en este blog que se dedica a la gastronomía, pero es bueno abrir horizontes y puertas y como me lo pase muy bien, no puedo dejar de compartir con vosotros una experiencia muy gratificante, divertida y en la que aprendí muchas cosas. No os lo perdáis y si vais a Baja Sajonia, no dejéis de visitar la «ciudad del automóvil de la Volkswagen»
Historia de la Volkswagen
La palabra “Volkswagen” está formada por: “volk” que significa pueblo, una “s” que es la letra que une los dos vocablos para conseguir formar una palabra nueva y “wagen” que significa coche “coche”
Y ese era el objetivo crear un coche para el pueblo, como había logrado hacer Henry Ford en Estados Unidos con el “Ford T”, a este menester se puso con mucho empeño Ferdinand Porsche que tenía una pequeña fábrica en Stuttgart, donde trabajo sin descanso hasta lograr el “tipus 32” el primer utilitario de Alemania. Era un pequeño vehículo compacto refrigerado por aire, fue el antecesor del escarabajo
Fue Jakob Werlin amigo de Ferdinand Porsche quien informo a Hitler de la existencia de tan singular vehículo, Hitler que sabía mucho de coches se interesó por el tema y cito a Porsche para que le contara el proyecto.
Después de muchas vicisitudes y reuniones la Asociación Alemana de fabricantes de coches contrato a Porsche desarrollar y fabricar un nuevo vehículo que gastará 7 litros por cada 100 km y estuviera refrigerado por aire.
Para fabricarlo a lo grande Hitler creo una gran planta de montaje y fabricación en una pequeña ciudad, muy tranquila de la Baja Sajonia que llamo “Stadt des KdF-Wagens bei Fallersleben”, fue inaugurada en 1938 y desde entones hasta ahora la ciudad ha cambiado muchísimo. En 1945 paso a llamarse Wolfsburg y tiene más de 120.000 habitantes, la vida de esta ciudad gira en torno a la omnipotente fábrica de coches.
Durante la guerra se paró la fabricación de automóviles que se retomó por los británicos. En septiembre de 1948 la Volkswagenwerk Gaby volvía a manos alemanas y fue Heinrich Nordhoff quién la dirigió durante 20 años, tenia los objetivos claros, quería fabricar un solo modelo de automóviles haciendo los menores cambios posibles en su diseño cambiar solo para mejorar la calidad para no perder su espíritu, en 1950 llegaron a fabricar 100000 vehículos del modelo VW.
Evolución de la la Volkswagen
Pero no les quedo más remedio que abrir las puertas a nuevos modelos adaptándose a la evolución de la vida alemana y a la evolución del automóvil, a los modelos que fabricaba la competencia. En 1975 presentaron en la feria de Frankfurt el “Golf” que fue el mejor coche del año y que en poco tiempo supero en ventas al “escarabajo”.
En 1953 se inauguró la planta de Sao Paulo en Brasil, hito importante en la historia de la súper fábrica de coches, llegando en 1955 llegaron a producir un millón de coches.
En la actualidad tienen fábricas en Alemania, Argentina, Bélgica, Brasil, China, España, Eslovaquia, Estados Unidos, Francia, Hungría, India, Italia, Israel, Malasia, México, Polonia, Reino Unido, República Checa, Rusia y Sudáfrica y son propietarios de doce marcas: Volkswagen, Audi, Seat, Skoda, Bentley, Bugatti, Lamborghini, Porsche, Ducati, Volkswagen Vehículos Comerciales, Scania Y Man.
Es propiedad como accionista mayoritario de “Porsche Automobil Holding”, seguido por Inversores Institucionales extranjeros, Qatar Holding, el Estado de Baja Sajonia y Accionistas privados. Cuentan con más de 642.000 a lo largo del mundo y tienen en una fábrica en Dresde totalmente nueva, de cristal, que permite ver los visitantes todo el proceso de fabricado de un automóvil.
La ciudad del automóvil
En Wolfsburg han creado la “ciudad del automóvil” un sitio curioso qué es interesante visitar, yo disfruté muchísimo entrando en el mundo del automóvil, totalmente desconocido para mí ya que mis conocimientos son mínimos.
Tienen diferentes pabellones destinados a sus marcas de coches, puedes disfrutar de un Maserati galáctico o subirte un Porsche descapotable para hacerte una foto en un coche espectacular.
Es súper interesante visitar su “museo del automóvil”, resulto ser una experiencia de lo más ilustrativa y muy divertida ya que es muy curiosa ver cómo ha evolucionado los automóviles a lo largo de los años. Te vas a encontrar con modelos espectaculares y otros que te hacen sonreír cuando los ves, verás coches que te recuerdan a Al Capone y sus gánsteres, coches con diseños locos buscando la innovación y la diferencia, en resumen modelos de todo el mundo que te dejaran clara la evolución del automóvil a lo largo de la historia.
En el pie de página, al final del post encontraras una galería con los coches mas molones de la exposición.
El entorno de la “Ciudad del automóvil” es verde y muy cuidado tiene unos tranquilos lagos en el que viven unas carpas descomunales, muy feas, que se acercan a los puentes para que les tires comida.
¿Donde comer?
Hay restaurantes y puestos de comida para todos los gustos, una pizzería, un restaurante alemán, una preciosa cafetería que tenía unas cestas/caseta típicas de las playas del Mar del Norte preciosísimas, unos cafés fantásticos y unas tartas para chuparte los dedos, Impis (puestos callejeros)… Además tienen un hotel de cinco estrellas con un restaurante 2 estrellas Michelín.
Pero lo más celebrado en este inmenso parque temático es el “Curry Wurst” una super salchicha gigantesca que sirve acompañada de patatas en ensalada o fritas, le añaden un kétchup con curry por encima, es un plato contundente y fuerte del que se sienten muy orgullosos y tanto la salsa como las salchichas son fabricadas especialmente para ellos. Venden millones al año y si quieres te puedes llevar la salsa ya que tienen en el restaurante hay una pequeña tienda.
En resumen
Me encantaron los super edificios de cristal, altísimos y estilizados mirando al cielo. Llenos de coches qué entregan a los nuevos propietarios que van a recoger sus vehículos a la ciudad del automóvil, pasan un día estupendo y se zampan sin piedad enormes platos llenos de salchichas, patatas y su espectacular salsa. Un día completo, coche nuevo y barriguita llena.
En resumen es una experiencia que no te puedes perder si vas a visitarla la Baja Sajonia cosa muy recomendable ya que es una preciosidad, será un día diferente, podrás hacer una inmersión en un mundo completamente distinta a lo que visitamos habitualmente, Iglesias, Museos… Yo me lo pase genial, disfrute muchísimo, comí una super salchicha con su salsa explosiva y aprendí cosas que no sabía.
¿que más se puede pedir???
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