Siempre me estoy preguntando de donde viene todo lo que me rodea; las cosas que como; los artilugios que me hacen la vida más sencilla o cualquier cosita que está al alcance de la mano. ¿Cual es su origen?; ¿a qué mente brillante se le ilumino la bombilla y nos regalo todos los tesoros que conforman nuestra vida cotidiana? Por eso es importante conocer los orígenes aunque sea someramente y saber de dónde viene lo que nos comemos y lo que disfrutamos.
Y el queso es no es una excepción, es tan rutinario que nunca nos hemos preguntado quién fue el primer humano que comió un queso ni su evolución. Que ha pasado desde ese primitivo primer queso hasta hoy en la que hay miles de variedades diferentes tan distintas unas de otras que conforman una galaxia alimentaria, todo un mundo lleno de sorpresas y por descubrir.
Por eso me he puesto de acuerdo con un súper queso como es Paramo de Guzmán para adentramos en los avatares de tan fantástico y variado manjar. Poco a poco vamos a ir estudiando su devenir a lo largo de la historia, su largo camino hasta el momento actual.
Y comenzamos por el principio, su origen y su evolución en las primeras civilizaciones, las que sentaron las bases de lo que será el mundo y el hombre.
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