No todos los días nos podemos comer una rica lubina salvaje, un pesado delicioso y bastante caro por lo que es muy importante elegir bien la receta con la que lo vamos a preparar. Me encanta a la sal pero en esta ocasión hemos preferido cocinarlo al horno y enriquecerlo con unas gambas, darle el toque crujiente con unas almendras laminadas y el picante con un poco de guindilla.
Este plato no se puede preparar y dejar cocinado para comerlo más tarde, cuando tus comensales estén a la mitad del primer plato, lo metes al horno, se hace muy rápido en diez minutos o menos estará listo por lo que hay que estar muy atentos ya que si se pasa será una autentica pena. Con este pescado todos tus comensales van a ser muy felices.
Es muy complicado pasar el pescado una vez cocinado a una fuente para sacarlo a la mesa por lo que te aconsejo que lo enseñes para que todos vean la maravilla que se van a comer y lo sirvas en la cocina, sacándolo emplatado a la mesa.
Lo puedes acompañar con patatas asadas o hervidas con un poco de mantequilla, le va bien cualquier guarnición muy natural sin sabores fuertes, tiene que ser algo que no mate el sabor de un pescado tan delicado y sutil.
Esta receta es de MIlagros Yuste, mi suegra una gran cocinera.
INGREDIENTES:
1 lubina de aprox. 1,200 gr., 2 diente de ajo grandes, ¼ kg. De gambas, 1 guindilla, almendras laminadas, sal, aceite
ELABORACIÓN:
En una sartén pequeña con ½ dedo de aceite doramos los ajos cortados en laminas y la guindilla, reservamos en el aceite de freír.
Al comprar la lubina le dijimos al pescadero que nos la abriera en forma de libro, quitándole la espina central (que guardamos para otras elaboraciones), la lavamos muy bien para quitarle todos los posibles rastros de sangre, la secamos con papel de cocina y la dispusimos en la bandeja del horno que previamente habíamos pincelado con aceite de oliva de los ajos.
Regamos la lubina con el aceite, la salamos y pimentamos si nos apetece, yo no lo hice, y la metemos al horno precalentado a 200º a los siete minutos revisamos el pescado que estará practicamente cocinado, le ponemos las gambas y las almendras por encima y lo volvemos unos tres minutos más o hasta que esté en su punto.
PRESENTACIÓN:
Es muy difícil pasar el pescado a una fuente bonita por lo que lo enseñaremos para que todos vean la maravilla que se van a comer y lo emplataremos en la cocina, lo adornaremos con los ajos crujientes, las almendras y las gambas y ya está listo para comer.
7 Comentaros
Una lubina estupenda, me gusta la probare sin duda. Besitos.
ya me contarás el resultado¡¡¡, un beso
Concha
k delñicia, yo sólo como lubina si es salvaje y si no la hay o esta muy cara me abstenmgo, no merecen la pena las de piscifactoria. El toque de las almendras me ha encnatado y me lo copio.
Muaks
no hay color yo tampoco como lubina de pisci, saben un poco a cieno¡¡¡¡, un beso
concha
Para mí es la forma más sencilla y deliciosa de preparar cualquier pescado grande, dorada, rodaballo, besugo, etc. Como variación, yo prefiero prepararlo entero, y una vez hecho, desespinarlo y añadirle el refrito, con un chorretón de vinagre de Jerez.
Saludos
Yo lo preparo tambien como tu me indicas, con espina y con el chorrito de vinagre, ¡¡genial¡¡, así esta para chuparse los dedos¡¡¡¡
IMPRESIONANTE!!