Decir que todos los caminos conducen a «Toni» es muy rimbombante pero casi es verdad, desde que llegamos a la Rioja fueron varias las personas que nos recomendaron visitar este local, y claro esta no pudimos hacer oídos sordos ante tanta insistencia. Además cuenta con el aliciente de estar ubicado en un pueblo precioso, San Vicente de la Sonsierra.
Es un restaurante con mucha solera, ya que comenzó su andadura en los años 60 de la mano de Remedios y Antonio. En la actual lo regentan sus hijos Jesús Sáez, el chef y Mariola Sáez jefe de sala y relaciones públicas, tengo que destacar su amabilidad y el excelente servicio que dirige, nos trataron fenomenal y estuvieron pendientes sin agobiar de nuestros más pequeños deseos, muy de agradecer. A Jesús no pudimos conocerlo pero es una asignatura pendiente.
Cuando visitas casa Toni te encuentras que tienes dos restaurantes en uno, el tradicional, “Toni Tradición” basado en la cocina de toda la vida y con «Casa Toni», moderno, con una cocina creativa y con una curiosa decoración y por cierro con las sillas mas cómodas de todos los restaurantes que conozco.
Nada más cruzar el umbral de la puerta tienen ubicada una fantástica “bodega” climatizada con cabida para 1700 botellas, impresionante, con vinos de todo el mundo, por lo que no hace falta que mencione la carta de vinos, pero estando donde están yo te recomiendo tomar un vino de la tierra que es nada mas ya nada menos que la Rioja Alta, con unos vinos extraordinarios.
Vamos a entrar en materia, nos decantamos por la cocina moderna pero los platos clásicos eran la bomba, vimos pasar ante nuestros ojos unas alubias rojas de Anguiano para quitarte el sombrero y un bacalao de esos de impresión, sin ningún problema te puedes comer unas patatas con chorizo o una menestra increíble o un bacalao al pil-pil y riojana que tenía una pinta sublime.
Si pinchas en las fotos veras que homenaje y que platos tan ricos:
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Nuestro primer entrante fueron unas sardinas marinadas deliciosas, frescas y ligeras con ajo blanco y helado de aceite de oliva, excelente pero el plato estrella de esta comida fue “la crema de patata a la Riojana con espuma de piquillo y laminas crujientes de chorizo”, una versión de las patatas con chorizo increíble, una crema suave y delicada con el sabor intenso del guiso tradicional, acompañado por un chorizo y un pimiento crujiente que no se me olvidara en mucho tiempo.
Seguimos con unas “chuletillas de conejo empanadas y refritas con ajo” buenisimas y un plato mar y montaña consistente en una papada de cerdo con salsa de mango, su crujiente y cigalas”, que era una maravilla, la papada era melosa y delicada y todos los ingredientes tenían una razón para estar en el plato, muy rico y apetecible.
Terminamos con los postres: «una torrija con helado de leche merengada» y «un pastel de queso fresco con tofe, frambuesa y galleta de elche condensada” que estaban riquisimisimas.
Tengo que destacar de Casa Toni varias cosas que lo hacen un sitio muy recomendable como es el tamaño de sus raciones muy generosas y abundantes, no me puedo olvidar del pan, llamado “pan de cristal” que era una delcia increíble. La amabilidad de su personal y el servicio excelente, la comodidad del local, la increíble bodega y por lo tanto la carta de vinos tan estupenda que tienen y por último la excelente cocina muy celebrada por toda la Rioja.
Comimos fenomenal, con un excelente vino de la zona, “Castillo de Mendoza “Momilde”.
Es el Restaurante Toni de San Vicente de la Sonsierra en La Rioja, un lugar muy recomendable.
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