El cebiche de champiñones es una sorpresa, nadie se imagina que un simple champiñón pueda ser una cosa tan delicada y exquisita, comer el champiñon crudo es la mejor forma de apreciar todas sus cualidades y esa carne dura y acartonada se convierte en una delicia melosa, tierna y llena de sabor.
El cebiche lo puedes preparar simplemente con limón pero yo te aconsejo que le incorpores maracuyá, la fruta de la pasión, es muy acida y tiene un sabor y un olor muy peculiar, perfumado e intenso y muy característico que te lleva a reconocerla rápidamente. Esta fruta tan bonita tiene unas minipepitas rodeadas por la carne, puede pasar la pulpa por un colador y sacar solo el jugo pero yo te aconsejo que lo incorpores tal cual, las pepitas no son desagradables y le aportan un toque crujiente.
Este cebiche lo he preparado con “pimientas palmeras” molidas, de las que se utilizan para hacer el mojo picón pero se puede utilizar cualquier guindilla, usa tu preferida o la que tengas a mano, debe estar seca y la mueles para que te quede polvo. El ceviche hay que prepararlo con 1 hora de antelación como minimo. Si lo dejas elaborado con anterioridad se quedara más blando y no es recomendable, ya que como esta rico es terso y crujiente y lleno de sabor.
Este es un aperitivo muy a tener en cuenta para la navidad, es delicioso y baratísimo, además es una elaboración poco conocida por lo que sorprenderás a todo el mundo.
Esta receta es don Lucho, del blog peruano: la cocina de Leticia y Don Lucho.
INGREDIENTES para cuatro comensales:
½ kg. De champiñones, 1 limón, aceite de oliva, 2 maracuyás, sal en escamas, guindilla molida.
ELABORACIÓN:
Lo primero que tenemos que hacer es limpiar bien el champiñón que no tenga restos de tierra; les quitamos el pie que reservamos para preparar una crema y los pasamos bajo el agua, inmediatamente los secamos con un paño de cocina o con papel absorbente.
Los cortamos en láminas muy finas, yo lo hice con un robot pero lo puedes hacer con la mandolina o a mano con paciencia.
Los colocamos en una hondilla y los regamos con aceite de oliva que sea suave pero con sabor y mucha calidad, le añadimos el zumo de limón y la pulpa del maracuyá, tal cual sale al partir la fruta por la mitad, una pizca de sal y lo dejamos marinar en la nevera.
PRESENTACIÓN:
Colocamos el cebiche en una fuente, le añadimos el jugo de la marinada y lo espolvoreamos con polvo de guindilla (si lo quieres picante) y con escamas de flor de sal y ya está listo para comer. ¡¡Que disfrutes!!
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