Hungría, su historia. Apuntes

La cocina húngara no es precisamente ligera,  un plato húngaro se carga todas las premisas nutricionales en el primer instante que comienzas a comer pero es exquisita, única y personal, como la tierra de la que proviene, por lo que para conocer el “ahora” vamos a dar un paseo por el “antes” cimiento de lo que  en estos momentos es Hungría y paso imprescindible para entender a un pueblo tan singular y amable como el magiar.

Hungría  (Magyarország) está ubicada en el centro de Europa, tiene fronteras al norte con Eslovaquia, Ucrania y Rumanía por el este, Serbia y Croacia  por el sur,  Eslovenia por el suroeste y Austria por el noreste.

 Es Budapest «la Perla del Danubio”,  su capital patrimonio de la humanidad. No tiene mar y hablan una lengua única en el mundo “el húngaro” que está  emparentada con el  fines, el estonio, el karelio, el lapón, el  janti, el mansi o las lenguas samoyedas. Son lenguas ugrofinesas también llamadas finougras o finougrias, se supone que desciende del lenguaje utilizado por un grupo de pueblos que hace miles de años poblaba los Urales y que en diferentes migraciones la extendieron hacia el norte y hacia este, con el paso del tiempo se fueron diferenciando pasando a ser lenguas totalmente distintas.

El húngaro es un idioma muy complicado y muy distinto a  los de raíz indoeuropea que predominan en Europa. Cuenta con: 14 vocales, 31 consonantes, 4 tipos de acentos diferentes; es un idioma aglutinante,  a la raíz de una palabra se le puede añadir uno o más sufijos que completaran lo que en otro idioma seria toda una frase; conjugan el infinitivo para persona y tiempo y una palabra o frase cambiara si te diriges a un interlocutor o a varios. Por lo que no es un idioma sencillo.

En Hungría han dejado su huella gran cantidad de pueblos que han marcado su idiosincrasia, en un principio formaba parte de la  Dacia una provincia romana y como todos los integrantes del Imperio no se libraron de las invasiones bárbaras así que por sus tierras pasaron  celtas, avaros, eslavos, hunos, gépidos…

Pero los antecesores del pueblo húngaro son los Magyars o magiares, tribus nómadas que vivían de la caza y de la pesca  en los Urales a lo largo del río Ob, poco a poco se fueron acercando a Europa dividiéndose en dos ramas, una se fue al norte, a Escandinavia y dieron origen a los fineses y Finlandia y la otra rama se encamino hacia los Cárpatos. Estaban dirigidos  por Arpád líder de una las siete tribus  que habían realizado un pacto de sangre, las estatuas de los siete jefes están ubicadas en la Plaza de los Héroes de Budapest. Protegidos por las montañas decidieron dejar la vida nómada y asentarse pero nunca se olvidaron  de ser guerreros y eran famosos y temidos por su pericia al disparar el arco a caballo.

En el SX el rey Vajk auspiciado por el Papa y el Emperador de Bizancio abandono sus creencias y su nombre y se convirtió en Esteban I  junto a todo su pueblo que abrazo el cristianismo y así comenzó una nueva era.

En los años 1241/1242 sufrieron la invasión tártara que paso como la peste destruyendo todo lo que había a su paso.

En el año 1301 Carlos Roberto de Anjou príncipe de Nápoles reclama el trono de Hungría como único heredero por rama materna y comienza una era de esplendor, siendo Hungría el mayor exportador de oro y plata de Europa y en  convirtiéndose en una potencia militar. A los Anjou les sucedió Segismundo de Luxemburgo que fue un gran propulsor del arte y la arquitectura gótica.

Pero el gran monarca húngaro fue Mátyás (Matías Corvino) que se anexiono Moravia, Bohemia y Silesia y opuso una gran resistencia a las invasiones turcas. Matías está rodeado de leyendas como la del cuervo y el anillo a la que debe su sobrenombre.

En 1526 las tropas húngaras fueron derrotadas en la batalla de Mohács comenzando la ocupación turca que duro 150 años dejando su huella en la historia y en la gastronomía.

Con la llegada de los Habsburgo los turcos fueron derrotados y los húngaros pasaron a formar parte de Austria, mas tarde el Imperio Austro-Húngaro. Esta fue otra época de bonanza y florecimiento llegando a ser Budapest una de las capitales más importantes de Europa con gran influencia en su entorno.

En 1902 consiguieron firmar un tratado con los austriacos que les convirtió en una provincia autónoma del imperio con   parlamento, ejercito, gobierno e instituciones políticas propias pero continuo siendo una nación rural y eminentemente agrícola bajo el dominio de una nobleza semi feudal y muy  poderosa que controlaba los principales recursos.

La perdida de la I Guerra Mundial fue desastrosa para Hungría que con tratado de Trianon (1920) perdió dos tercios de su territorio que pasaron a formar parte de los nuevos estados centro europeos.

En la II Guerra Mundial se integro en el “Eje” junto a Italia, Alemania y Japón recuperando parte de su territorio perdido, pero la derrota llego tras la dura batalla de “Budapest” donde hubo un numero ingente de muertos y fue ocupada por el ejército rojo iniciando una nueva etapa de su historia,  se instauro el régimen comunista liderado por el Partido de los Trabajadores Húngaros pasando a formar parte del pacto de Varsovia y del Consejo de Asistencia Económica Mutua (COMECON).

En 1956 hubo un levantamiento contra el intervencionismo soviético  que termino con la ejecución del primer ministro Imre Nagy y la entrada del ejército ruso en Budapest.

Poco a poco Hungría fue abriendo sus puertas a una economía de mercado y a las reformas políticas, siendo el país que mejor afronto la caída del régimen soviético entrando a formar parte de la OTAN en 1999 y a la Unión Europea el 1 de mayo de 2004.

En la actualidad es un país moderno, con mucho turismo e integrado en la Europa del siglo XXI.